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Lluvia de cenizas descienden del volcán en Eyjafjälla. | Reuters

Las cenizas del volcán islandés pueden enfriar la temperatura global

Las cenizas del volcán del glaciar Eyjafjällajokull en Islandia, que han paralizado gran parte del espacio aéreo de Europa, podrían influir sobre el clima de la Tierra si alcanzan la estratosfera, según ha asegurado un experto austríaco.

Si las partículas de ceniza del volcán islandés alcanzan la estratosfera, eso podría tener durante varios años "un efecto refrigerador" porque reduciría la radiación solar, según aseguró el climatólogo de la Universidad de Viena Herbert Formayer a la radio pública austriaca ORF.

La estratosfera es la segunda capa de la atmósfera y comienza a unos 12 kilómetros de altura sobre la superficie de la Tierra.

"A esa altura no hay lluvias que puedan reducir o "lavar" las partículas, por lo que las cenizas puede permanecer allí durante dos o tres años", manifestó el experto de la Universidad de Viena.

"Durante esa época se reduce la radiación del sol y eso tiene un efecto refrigerador", explicó Formayer. La nube refleja la radiación solar hacia el espacio y por eso no alcanza la superficie terrestre.

Este fenómeno ya se produjo en 1991 con la erupción del monte Pinatubo, en Filipinas, "cuando sus cenizas llegaron a dar la vuelta al mundo y eran perceptibles muchos meses después del desastre", ha explicado Joan Martí, secretario general de la Asociación Internacional de Vulcanología.

"Aquel desastre tuvo consecuencias incluso climáticas porque hizo descender la temperatura global al reflejar la luz solar hacia el espacio", manifestó Martí.

Joan Martí, investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) considera que la nube de ceniza es "relativamente pequeña" y no constituye "nada del otro mundo". Desde su punto de vista, la contaminación que ha generado por el momento es "relativamente baja", aunque "habrá que tenerla en cuenta si la nube alcanzara un volumen más importante".

Por esta razón, considera que la erupción no constituye hasta el momento "ninguna catástrofe ambiental". A efectos químicos, sus componentes son básicamente derivados del azufre.

"El mayor problema es el tráfico aéreo, porque la erupción en sí es relativamente pequeña, no es nada del otro mundo", añadió. Martí considera que la investigación vulcanológica "está muy bien cubierta" en España, donde trabajan en ella organismos como el CSIC y el Centro de Supercomputación de Barcelona, que cuenta con un grupo que se dedica específicamente a la simulación y modelización de fenómenos de columna eruptiva y dispersión de ceniza.

La nube de ceniza que ha causado el volcán de Islandia "era previsible desde el punto de vista de que es lo que ocurre en la mayoría de las erupciones". Sin embargo, Martí apuntó que esta dispersión de cenizas "se ha producido hacia el continente por los vientos, cuando la mayoría se mandan hacia el norte". España podría verse afectada por nubes de volcanes procedentes de Italia o Canarias.

Fuente EFE.

16/04/2010 12:06:29